domingo, 14 de marzo de 2010
Razonamiento verbal
foto: Máx Cárdenas Yenque / ElCiclónDelNorte.com
¿Tanto pudo cambiar Aurich de un tiempo para acá? Muchos cuestionan, pocos tratan de analizar el ¿Porque? del bajón futbolístico sufrido por el Ciclón en estas siete primeras fechas de la liguilla final.Paul Pérez Rioja
[paul.perez@elciclondelnorte.com]
Los resultado hablan por si solos, de siete partidos solo se gano una vez, se empato en tres ocasiones y se perdió en la misma cantidad de veces, tan solo seis de 21 puntos
posibles, cinco se consiguieron en el Elías Aguirre y tan solo uno fuera del recinto del paseo del Deporte. Sin duda, ni el más pesimista de los hinchas del Ciclón, se imagino, esta paupérrima campaña en la liguilla, sobre todo después de la notable actuación del Rojo Norteño a lo largo de las 30 primeras fechas, donde termino como líder absoluto. A continuación trataremos de aclarar, este nebuloso panorama que hoy se presenta en tienda chiclayana, y además dar a conocer las razones del, porque, nosotros creemos que se ha caído el Ciclón.
Tan abrupta como él
Desde mi punto de vista, una de las principales causas, del bajo rendimiento del equipo, fue la salida repentina y sorpresiva del comando técnico, que tenía como cabeza a Franco Navarro. Con el popular “Pepón”, el Ciclón jugo todo el año con línea de tres, teniendo dos volantes laterales que los apoyaban y un enganche bastante definido. Ante este suceso, ya bastante manoseado, sobre la ida de Navarro, el Ciclón trato de conseguir a su reemplazante idóneo. Después de que se vocearon muchos nombres, la dirigencia roja se decidió por Luis Fernando, un técnico de jerarquía, pero que lamentablemente encontró equipo con una filosofía de juego, muy diferente a la que gusta utilizar, que es como todos sabemos la línea de cuatro bien definida, con una volante cuadrada, sin enganche, y con dos referentes de ataque. Este cambio, no solo de técnico, sino de sistema de juego, es obvio que afecta al Ciclón.
¿No a la rotación?
Muchos criticaron lo que a principio de año, lo que hacia el técnico de la U, Juan Reynoso, la tan mentada rotación (semana a semana). El la justificaba, aduciendo que a finales de temporada su equipo iba a llegar mejor en el aspecto físico, y que además no le iba afectar la salida de algún jugador en caso se produjera alguna lesión o en producto de un decaimiento de su rendimiento. El tiempo le dio la razón. En Aurich, casi toda la temporada se jugo con un mismo equipo, donde los jugadores se conocían de memoria, alguna lesión o cambio brusco en el equipo, obviamente iba afectar a su funcionamiento. Y si a esto le sumamos la saturación física que tienen algunos jugadores, producto de que han jugado casi todos los partidos del torneo, resulta fatal, solo quiero poner un caso, el de Mayer Cándelo, de los 37 partidos hasta ahora disputados, jugo 35, una cifra bastante alta, y que obviamente, pasa la factura, no lo solo en el aspecto físico, sino también futbolístico. Para variar otra perlita de Franco Navarro.
posibles, cinco se consiguieron en el Elías Aguirre y tan solo uno fuera del recinto del paseo del Deporte. Sin duda, ni el más pesimista de los hinchas del Ciclón, se imagino, esta paupérrima campaña en la liguilla, sobre todo después de la notable actuación del Rojo Norteño a lo largo de las 30 primeras fechas, donde termino como líder absoluto. A continuación trataremos de aclarar, este nebuloso panorama que hoy se presenta en tienda chiclayana, y además dar a conocer las razones del, porque, nosotros creemos que se ha caído el Ciclón.
Tan abrupta como él
Desde mi punto de vista, una de las principales causas, del bajo rendimiento del equipo, fue la salida repentina y sorpresiva del comando técnico, que tenía como cabeza a Franco Navarro. Con el popular “Pepón”, el Ciclón jugo todo el año con línea de tres, teniendo dos volantes laterales que los apoyaban y un enganche bastante definido. Ante este suceso, ya bastante manoseado, sobre la ida de Navarro, el Ciclón trato de conseguir a su reemplazante idóneo. Después de que se vocearon muchos nombres, la dirigencia roja se decidió por Luis Fernando, un técnico de jerarquía, pero que lamentablemente encontró equipo con una filosofía de juego, muy diferente a la que gusta utilizar, que es como todos sabemos la línea de cuatro bien definida, con una volante cuadrada, sin enganche, y con dos referentes de ataque. Este cambio, no solo de técnico, sino de sistema de juego, es obvio que afecta al Ciclón.
¿No a la rotación?
Muchos criticaron lo que a principio de año, lo que hacia el técnico de la U, Juan Reynoso, la tan mentada rotación (semana a semana). El la justificaba, aduciendo que a finales de temporada su equipo iba a llegar mejor en el aspecto físico, y que además no le iba afectar la salida de algún jugador en caso se produjera alguna lesión o en producto de un decaimiento de su rendimiento. El tiempo le dio la razón. En Aurich, casi toda la temporada se jugo con un mismo equipo, donde los jugadores se conocían de memoria, alguna lesión o cambio brusco en el equipo, obviamente iba afectar a su funcionamiento. Y si a esto le sumamos la saturación física que tienen algunos jugadores, producto de que han jugado casi todos los partidos del torneo, resulta fatal, solo quiero poner un caso, el de Mayer Cándelo, de los 37 partidos hasta ahora disputados, jugo 35, una cifra bastante alta, y que obviamente, pasa la factura, no lo solo en el aspecto físico, sino también futbolístico. Para variar otra perlita de Franco Navarro.
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